jueves, 26 de agosto de 2010

República Dominicana: Los resorts me gustan lo justo!























A lo mejor no es el mejor sitio para hacerlo, por que en realidad me lo pasé estupendamente y disfruté enormemente de familia y descanso. También por que es la actitud que hay que tener, si no de qué! Pero desde la experiencia, repetida, y desde mi más humilde opinión, me propongo firmemente no volver a hacer uso de los complejos hoteleros de planes de pulsera "todo incluido" que también podrían llamarse "todos incluidos" en el sentido más impersonal y borreguil de la expresión. Será que hay mucha gente que cuando está de vacaciones sólo quiere meterse en una mini-ciudad de estas, comer de barbacoas, torrarse al sol y tomar mojitos..., me parece cojonudo!...pero joe! Hay tanto por ver! Y eso que aunque lo intentes te quedas en la superficie en gran medida, pero al menos intentarlo! Además que lo de la fiesta y la marcha en estos sitios no motiva demasiado, salvo que vayas ya con tu gente, que en ese caso cualquier sitio es gueno!


Otra crítica o aviso es que, al menos en el Hotel en el que estábamos, por cierto era el Sirenis Cocotal Beach por colocar el viaje o la excursión que sea, no te dicen la verdad acerca del mismo, si no que te contaban lo que querías oír, con el correspondiente cabreo cuando lo comprobabas. Pero bueno, duró poco,...para qué!








Lo dicho, que lo anterior y mi eterna lucha con los mosquitos, no quitó para disfrutar de la barra libre, un poco de ejercicio, simpatía sincera del personal, largos paseos como siempre con mi música y mi cámara, mi librito y sobre todas todas las cosas, de mi Mamáaaaa! Tan linda ella!

miércoles, 25 de agosto de 2010

República Dominicana: Samaná y un finde entre cocotales!

Entre todas aquellas reuniones y vidilla nocturna colonial, un fin de semana estupendo con los y las nuevas colegas residentes en Santo Domingo, traslandándonos al norte de la isla, a las Terrenas, donde después de dar unas vueltas nos quedamos en el Hotel Palapa, dado que tras regatear nos quedó en un precio muy apañao y la pinta era como muestra la foteli aquí a la verita. De destacar la piscina (que no es ese estanque lleno de verde!) de la que hicimos diversos y buenos usos, como tomar copas en su terraza y baños nocturnos.

Un trayecto fácil por la autopista, que inaugurada hace pocos años, te permite llegar a zona "no resort" de playa, con buena fiesta, comida y alojamientos sencillos y cómodos. Zona de bares frente al mar que te permite pegarte unos bailoteos descalzo sobre la arena, e incluso un buen baño nocturno antes de acabar la noche. El bar que cerraba más tarde y con ambiente local "El Mosquito". Mu rico!

Justo en frente del hotel una playa perfectamente válida, si bien mereció la pena desplazarse unos kilómetros para disfrutar de la soledad de otros espacios como Playa Cosón, en la cual se puede surfear y comer un rico pescaito con papas fritas en el Restaurante Luis. Ojo con el atardecer y los mosquitos! Me pusieron fino!

Desgraciadamente, como en tantos otros lugares, existen unos pocos idiotas que botan basura donde les sale de los mismísimos! Un poco de cultura por favor! Por dicha semejante cantidad de cocotales, las arenas, las aguas y las gentes hacen que obvies este dolor visual y ambiental rápidamente!

De nuevo gracias a mis anfitriones!






domingo, 15 de agosto de 2010

República Dominicana: Santo Domingo con amigos y familia, otra vara!

Durante dos semanas intensivas de trabajo, en las que mantuve alrededor de 40 reuniones con diferentes instituciones por toda la geografía de la ciudad de Santo Domingo, logré compaginar a la perfección vida profesional y ocio, gracias sobre todo a la gran disposición de las gentes residentes que conocí por suerte de la red de amigos que trabajan en cooperación en la zona, y que me recibieron como a uno más. Tan lindos ellos!!! Nada que ver aterrizar sin conocer a nadie en un lugar, con tener la suerte de contar con cicerones sociales y turísticos de la localidad. A ello se sumaba el encuentro con mi madre , con quien también disfruté de la capital dominicana.

La zona colonial se convirtió en el mejor escenario para pasar las calurosas tardes y sobre todo noches, en compañía de cerveza Presidente, ron Brugal, merengue, bachata y la inquieta comunidad de tanto nacionales como internacionales que se reunen en espacios como el parque Duarte. De nuevo, al igual que ocurrió en mi anterior visita al país, el Centro Cultural Español, y en esta ocasión también sus allegados, representó el proveedor ideal de divertimento, cultura y aprendizaje. Entre las actividades el grupo de Teatro Zanguango y su "Tocata y Fuga(en fu remol)" con el telón de fondo de la iglesia en ruinas del final de la calle Arzobispo Meriño, en la cual participé casi sin darme cuenta recibiendo un mordisco del personaje con cara de loco de la derecha. Profunda y muy divertida.

Otras escenas de mi estancia fueron Concierto de Hip Hop, Alicia en el País de las Maravillas en 3-D(me defraudó! y eso que me lo pasé en grande con las comentarios a voz en grito y carcajadas de los espectadores), Jazz en la Casa Teatro, visionado del reportaje social "En un lugar del planeta", exposiciones, visitas a playas cercanas a la capital como las de Juan Dolio y carreritas musicadas por el malecón, que pese al intenso tráfico, permitía disfrutar de lindos atardeceres.

Otra suerte que tuve, es que al ser Semana Santa, pude observar de qué forma calaron costumbres españolas en la cultura nacional, y salvando las lógicas distancias, es sencillamente acojonante lo parecido de las procesiones de Santo Domingo con las que como buen sevillano disfruté tantos años. Quien te dice que la foto del paso de la Virgen no es en los Alcazares de Sevilla, en lugar de frente a la Catedral Primada de América!!














Comida rica en todo momento, gracias a la cortesía de mis anfitriones, o bien en los restaurantes de la zona, que son muchos, como ya mentado en este blog, Mesón de Barí, que volví a disfrutar esta vez con familia.

Por último, y justo por ello muy importante, recomendar la visita al local La Mata de Mango, en C/ 19 de Marzo, 203, Zona Colonial. Yo no lo vi inaugurado, pero por las fotos, comentarios, y sobre todo por la gente que ponía en marcha, de fijo que merece la pena pasarse por allí.