domingo, 15 de agosto de 2010

República Dominicana: Santo Domingo con amigos y familia, otra vara!

Durante dos semanas intensivas de trabajo, en las que mantuve alrededor de 40 reuniones con diferentes instituciones por toda la geografía de la ciudad de Santo Domingo, logré compaginar a la perfección vida profesional y ocio, gracias sobre todo a la gran disposición de las gentes residentes que conocí por suerte de la red de amigos que trabajan en cooperación en la zona, y que me recibieron como a uno más. Tan lindos ellos!!! Nada que ver aterrizar sin conocer a nadie en un lugar, con tener la suerte de contar con cicerones sociales y turísticos de la localidad. A ello se sumaba el encuentro con mi madre , con quien también disfruté de la capital dominicana.

La zona colonial se convirtió en el mejor escenario para pasar las calurosas tardes y sobre todo noches, en compañía de cerveza Presidente, ron Brugal, merengue, bachata y la inquieta comunidad de tanto nacionales como internacionales que se reunen en espacios como el parque Duarte. De nuevo, al igual que ocurrió en mi anterior visita al país, el Centro Cultural Español, y en esta ocasión también sus allegados, representó el proveedor ideal de divertimento, cultura y aprendizaje. Entre las actividades el grupo de Teatro Zanguango y su "Tocata y Fuga(en fu remol)" con el telón de fondo de la iglesia en ruinas del final de la calle Arzobispo Meriño, en la cual participé casi sin darme cuenta recibiendo un mordisco del personaje con cara de loco de la derecha. Profunda y muy divertida.

Otras escenas de mi estancia fueron Concierto de Hip Hop, Alicia en el País de las Maravillas en 3-D(me defraudó! y eso que me lo pasé en grande con las comentarios a voz en grito y carcajadas de los espectadores), Jazz en la Casa Teatro, visionado del reportaje social "En un lugar del planeta", exposiciones, visitas a playas cercanas a la capital como las de Juan Dolio y carreritas musicadas por el malecón, que pese al intenso tráfico, permitía disfrutar de lindos atardeceres.

Otra suerte que tuve, es que al ser Semana Santa, pude observar de qué forma calaron costumbres españolas en la cultura nacional, y salvando las lógicas distancias, es sencillamente acojonante lo parecido de las procesiones de Santo Domingo con las que como buen sevillano disfruté tantos años. Quien te dice que la foto del paso de la Virgen no es en los Alcazares de Sevilla, en lugar de frente a la Catedral Primada de América!!














Comida rica en todo momento, gracias a la cortesía de mis anfitriones, o bien en los restaurantes de la zona, que son muchos, como ya mentado en este blog, Mesón de Barí, que volví a disfrutar esta vez con familia.

Por último, y justo por ello muy importante, recomendar la visita al local La Mata de Mango, en C/ 19 de Marzo, 203, Zona Colonial. Yo no lo vi inaugurado, pero por las fotos, comentarios, y sobre todo por la gente que ponía en marcha, de fijo que merece la pena pasarse por allí.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Menuda PAYOLA Rafita, te declaro puro Dominicando... nos pusiste las 4 bandera en alto caramba!!!! NK..